Los ídolos de piedra, situados en la meseta Mam-pupu-nior, en Komi, Rusia, son unas enormes moles de piedra formadas gracias al viento, la lluvia y a las fluctuantes temperaturas durante millones de años, es decir, gracias a la erosión.
Cuna de los pueblos originarios de Siberia, estas formaciones se han convertido en santuarios de las gélidas regiones de Rusia. Estas formaciones, que tienen entre 30 y 40 metros de altura, son como una especie de Stonehenge natural, y estan lejos de cualquier montaña, de hay su enorme atractivo. Son como gigantes en mitad de la nada. Son conocidas como piedras Mansi, o milagros en Rusia.
Para los Mansi, una de las étnias aborígenes, constituyen los ídolos de piedra que han adorado durante cientos de años.
Las sugerentes formas de estas formaciones, se pueden asemejar a un hombre, cabezas de caballo o de ternero, es por esto, que el pueblo Mansi las ha adorado durante tanto tiempo, aunque la mística de las leyendas es así, se va diluyendo con el tiempo y solo quedan borrosos recuerdos.
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